Design Thinking Qualified (DTQ)® – On Demand

En Design Thinking participante podrá obtener la certificación internacional DTQ®, habiendo comprendido aspectos fundamentales de la metodología utilizada por las principales organizaciones incluidas en el S&P 500 para desarrollar nuevos productos. El curso puede ser realizado en los días y horarios que tu definas e incluye casos de estudio y simuladores de exámenes.

El Design Thinking es mucho más que una metodología; es un enfoque completo y centrado en el ser humano para abordar problemas y generar soluciones innovadoras. A través de este proceso, se fomenta la empatía con los usuarios finales, lo que ayuda a comprender sus necesidades, deseos y contextos de una manera profunda y significativa.

Una de las características distintivas del Design Thinking es su enfoque iterativo y colaborativo. A lo largo de las diversas etapas del proceso, que van desde la comprensión del problema hasta la implementación de la solución, se fomenta la colaboración multidisciplinaria y se valora la experimentación rápida y el aprendizaje a través del fracaso controlado. Esto permite que los equipos generen ideas audaces y creativas, así como también que puedan refinarlas y mejorarlas continuamente en base a retroalimentación real.

El Design Thinking también promueve la generación de prototipos como una forma de materializar y validar ideas de manera rápida y económica. Estos prototipos pueden ser simples maquetas físicas, representaciones visuales o incluso simulaciones interactivas, dependiendo de la naturaleza del problema y del contexto en el que se esté trabajando. La idea es obtener retroalimentación temprana y frecuente de los usuarios, lo que permite refinar y mejorar las soluciones de manera ágil.

En cuanto a su aplicación en empresas del índice S&P 500, esto refleja su relevancia y eficacia en un contexto empresarial competitivo y en constante evolución. Las organizaciones líderes comprenden la importancia de la innovación centrada en el usuario para mantenerse relevantes y competitivas en el mercado, y el Design Thinking ofrece un marco sólido para impulsar este tipo de innovación.

En resumen, el Design Thinking es una poderosa herramienta para el desarrollo de nuevos productos y soluciones, ya que combina la creatividad, la empatía y el enfoque iterativo para generar ideas innovadoras y centradas en el usuario. Este enfoque puede ser aplicado en una amplia gama de proyectos de innovación, desde el diseño de productos y servicios hasta la mejora de procesos y la resolución de problemas complejos.