El martes 3 de enero, EPIC AEROSPACE puso en órbita el remolcador de nanosatélites Chimera Leo 1. Un vehículo de transferencia orbital capaz de ubicar los satélites en órbitas específicas. EPIC AEROSPACE es una joven startup de remolcadores espaciales, creada en Estados Unidos por el ingeniero argentino Ignacio Belieres Montero, cuyo objetivo es situar en su órbita exacta a pequeños satélites que no llevan motores ni combustible.  Conversamos con Luca Estebenet, líder de operaciones de la compañía, sobre lo que viene en la Industria Aeroespacial, la reducción de los costos de acceso al espacio y la promoción de una mayor accesibilidad y participación en el mismo.

 

¿Cómo nace EPIC AEROSPACE?

EPIC es en su esencia, una empresa de transporte de última milla en el espacio.

Esto significa que nuestro enfoque está en transportar carga desde donde sea que la deje un cohete/lanzador grande como los de SpaceX o Blue Origin, hasta su destino final en el espacio.

Se puede pensar como un Uber en el espacio, que te permite llegar desde el aeropuerto hasta tu casa, a demanda.

Realmente, es un negocio bastante nuevo, que está impulsado por el hecho de que los cohetes más baratos del mercado, como los de Elon Musk o Jeff Bezos, son cada vez más grandes, pero los satélites lanzados hoy son cada vez más chicos.

Nuestra solución es simple. Permitimos que los satélites chicos se lancen agrupados en cohetes grandes, y que después lleguen aun así a su destino final a través de nuestras naves de transporte orbital.

 

Hasta ahora la industria aeroespacial era un negocio de grandes jugadores ligados a la iniciativa pública. ¿De qué manera irrumpen los nanosatélites en el mercado aeroespacial?

Exacto. La industria espacial tiene una gran similitud en sus inicios con la industria de la computación. Sin embargo, es claro que la computación superó en crecimiento por muchísimo a la industria del espacio. Ni hablar si tomamos las últimas décadas de la humanidad, la computación fue la reina de la tecnología y su crecimiento fue exponencial. De hecho si vemos a $AMZN, $AAPL, $META $GOOG y $MSFT su capitalización de mercado ronda los 7 trillones de dólares (20 veces el PBI de la Argentina) y son las empresas más valiosas del mundo y todas tienen que ver con la computación.

 

¿Por qué la computación logró crecer muchísimo más que la conquista al espacio?

Esto se dio básicamente porque el programa espacial creció con aportes de gobiernos (y no iniciativa privada) y eso volvió a la industria muy conservadora, cara, burócrata y aversa al riesgo.

La informática, en cambio, progresó de la mano de inversores privados y de cara al mercado. Esta combinación de innovación privada y economías de escala redujo los costos de esta tecnología por un factor de 1000 y eso revolucionó el mundo. Eso, principalmente, hizo que la evolución de las computadoras sea mucho más rápida que los satélites y la conquista del espacio.

 

¿Cómo logró la industria aeroespacial la aceleración de los últimos años?

A partir del 2002, Elon Musk crea la primera empresa espacial privada y comienza una revolución, que hoy, es mundial. Elon logró reducir los costos de lanzamiento 20x y gracias a esto nacieron decenas de startups que se propusieron bajar los costos de acceso y logística en el Espacio.

La industria aeroespacial, impulsada por Elon Musk, creó un ecosistema inmenso, en el cual decenas de empresas están desarrollando negocios que ya son unicornios en el día de hoy y muchas lo serán en el futuro. Algunas de las empresas que lideran el mercado son: SpaceX, Rocket Lab, Relativity Space, Firefly, Planet, etc.

Es muy claro que la próxima revolución es en la industria aeroespacial (tanto en lo comercial como en lo estratégico).

 

¿Cuáles son las funciones de los nanosatélites?

Los nanosatélites tienen múltiples funciones: observación espacial, observación del tránsito terrestre y observación de la meteorología. También tienen profundo alcance en el rubro de la comunicación, en el rubro marítimo, GPS, sensores y demás.

 

¿De qué manera los nanosatélites democratizan el acceso al espacio?

Los pequeños satélites son democratizadores del acceso al espacio ya que permiten por una fracción del costo de un satélite grande tener satélites propios ya sea de manera privada o para los Estados en vías de desarrollo que están comenzando a innovar en la industria.

 

¿Cómo se inserta Sudamérica en general, y Uruguay en particular, dentro de la industria aeroespacial?

Sudamérica en general se posiciona de manera fenomenal frente a la próxima revolución espacial. Contamos con gran cantidad de mano de obra calificada que está completamente formada y preparada para realizar grandes proyectos e innovar. Asimismo, la mano de obra en Sudamérica es más competitiva en términos económicos que en EEUU o Europa, lo cual nos posiciona doblemente mejor ya que estamos hablando de una industria capital intensiva.

Por su parte, Uruguay es el país mejor posicionado para emprender en términos de relaciones comerciales e impositivas. En Uruguay encontramos instituciones fuertes y serias que entienden hacia dónde va el mundo y las facilidades que necesitan las empresas para poder operar y generar negocios sanos que produzcan más de lo que gastan.

 

¿Qué operaciones tienen hoy en Uruguay?

Nuestra operación en Uruguay consta en una fábrica de unos 400 metros cuadrados ubicada en ZONAMERICA. Contamos con una planta especializada en procesos de manufactura de hardware. También contamos con espacio de oficinas y depósito.  Toda esta infraestructura nos permite comercializar, importar y exportar sin problemas.

Sin lugar a duda, pensamos seguir creciendo en Uruguay. Desde el primer momento que ingresamos en ZONAMERICA nos sentimos en un parque del primer mundo. Desde las instalaciones, al capital humano de la gente que nos ayudó a desembarcar en esta gran aventura.

 

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